Yoram Bauman ha sido un descubrimiento reciente para mi, la lectura de su libro Introducción a la Microeconomía en viñetas, me ha hecho ver la economía desde una perspectiva no sólo interesante sino divertida. Bauman es doctor en economía medioambiental y ha unido humor y divulgación. Su Principles of economics, translated, se ha convertido en un video de culto en internet, con más de un millón de descargas. Por supuesto, es profesor.Además de su libro Introducción a la microeconomía en viñetas ha publicado Introducción a la macroeconomía en viñetas (Debate), con dibujos de Grady Klein.
Algunas de sus frases:
"Tener humor ayuda a sobrellevar estos momentos difíciles, yo también he perdido dinero con esta crisis -asegura Bauman-. En la universidad escribí una parodia de un libro de texto de economía (sobre los diez principios básicos de la economía) y lo publicaron en una revista de divulgación científica de humor y empecé a cogerle el gusto a esto de mezclar la economía con la comedia y el monólogo. A la larga se ha convertido en una forma de vida".
"Además, el cómic es mucho más accesible que un texto de economía. Es difícil que se interesen por temas económicos, pero si se los presentamos en viñetas les resultaran más accesibles y atractivos".
"A los economistas nos gusta pensar que el principio fundamental de la economía es que las empresas y las personas optimizan sus recursos -asegura Bauman- que tienen un comportamiento racional, que buscan su propio interés, quieren maximizar sus beneficios. Y la pregunta fundamental de la economía es sí de verdad el mundo está lleno de individuos que buscan lo mejor para sí mismos, porque eso nos llevaría a prosperar".
"El chiste en economía es que los microeconomistas se equivocan en cosas pequeñas y los macroeconomistas meten la pata en las cosas más grandes -comenta Bauman-. En el libro deIntroducción a la microeconomía cuento las inteacciones de individuos que se optimizan, e incluyo cosas como la oferta y la demanda el impacto de los impuestos sobre el ciudadano, pero también la teoría de juegos, las subastas... Sin embargo, en el libro deIntroducción a la macroeconomía hablo de cosas que afectan a la gran economía como la inflacción, el ciclo de negocios oel crecimiento económico a largo plazo".
"La economía y el medio ambiente son compatibles. Hay una espcialización en economía que se divide en dos partes, una que tiene que ver con la pesca, la caza, etc y otra que se ocupa de la contaminación. Yo me centro más en la forma en que se pueden usar las herramientas económicas del capitalismo para proteger el medio ambiente".
"Hay que poner impuestos a los que contaminan. Yo estudio cómo si se graba la contaminación habrá cosas más caras como ir en coche o en avión, pero esos impuestos con los que grabamos a la gasolina se pueden usar para disminuir otros como los de la renta, para que la economía, en su totalidad no sufra. La idea es grabar las cosas menos deseables o dañinas en lugar de cobrar impuestos sobre las cosas que sí queremos que prosperen".
"El economista suele pensar que las personas normales optimizan sus recursos, no podemos enseñar a nadie a ahorrar en la compra, pero sí hay algunas áreas en las que podemos echar una mano. Por ejemplo, si estas pensando en ahorrar para la jubilación contratas a alguién para que te aconseje, para que invierta tu dinero. Un economista suele pensar más en inversión pasiva en vez de activa. Como comprar un pisito en vez de invertir en otra cosa. O hacer inversiones diversificadas, nunca poner todos lo huevos en la misma cesta, como se dice popularmente. En estos aspectos el libro si puede ayudar a la gente a ahorrar".
"El chiste de los economistas es que han conseguido predecir la mayoría de las últimas crisis y aún así no se han evitado -comenta Yoram-. Aunque no sabemos pronosticar burbujas, eso lo hacemos a toro pasado".
"En cuanto a la crisis mundial actual es un hoyo bastante profundo y nos va a costar salir. Aunque en EE.UU. al menos vamos en la dirección correcta. El tema de la crisis europea es muy difícil porque si vives en Mississippi y te quedas en paro puedes irte a otro estado, porque tenemos el mismo idioma y la misma cultura, mientras que en Europa es mucho más complicado coger tus trastos e irte a otro país".
"Además, es una situación en la que Alemania tiene un nivel económico muchísimo más elevado y saneado que el de Italia o Grecia, que van por otro camino totalmente diferente. En Estados Unidos no sucede así, el nivel de vida y los recursos son más parecidos en todo el país. El Euro se enfrenta a grandes desafíos".
En la Gran Depresión americana el paro era del 25 por ciento, actualmente en España es del 27. "En la Gran Depresión las estadísticas económicas no eran demasiado fiables, pero hay cosas similares, como la economía sumergida en España, que es una cosa que no se puede negar. En Madrid me he sorprendido porque me esperaba que la depresión iba a ser más visible, y no se nota demasiado".
"Quiza no sea tan visible porque en España los lazos familiares son muy fuertes, hay una o dos generaciones viviendo todavía con los padres. Y esa cercanía familiar no la hay en EE.UU. Es una situación que yo no había visto antes. En Estados Unidos hemos tenido un paro del diez por ciento y mi padre me decía "fijate cómo están de llenos los restaurantes. Como compra la gente" y seguramente si viniese a España diría lo mismo. No sé como estará la economía sumergida, pero debe haber bastante".
En cuanto a la política impositiva del gobierno español piensa que "Creo que es un error. Los que estudian este tema como el FMI están empezando a darse cuenta de que impide el crecimiento".
"Creo que cuando la economía va bien es fácil gastarse el dinero. Por ejemplo, como mi hermano ganaba un pastón se gastaba el dinero en cosas que a mí ni se me ocurrirían. Pero ahora se ha divorciado y la cosa ha cambiado. Ahora le digo, lo ves, ¿te hacía falta comprarte un coche nuevo?. No sé si los hogares españoles se han comportado así, pero deben empezar a pensar en si era necesario gastarse el dinero en lo que se lo han gastado. Deberíamos tener en cuenta la idea psicológica de los "pensamientos felices". Cuanto más gastas no eres necesariamente más feliz, porque tus espectativas siguen subiendo a medida que gastas. A veces gastando menos somos más felices".
"El fin de la pobreza va a ser una de las grandes historias de este siglo" -asegura Bauman-. No digo que vivamos para verlo pero veremos enormes progresos. Ya los hemos visto en China o en India y tenemos la esperanza de que se produzca en África. Creo que muchos saldrán de la pobreza en las próximas décadas".
"Los países desarrollados crecerán más lentamente, a un ritmo de un dos o tres por ciento anual, mientras que los países más pobres lo harán mucho más rápidamente hasta que nos alcancen y se estabilicen al mismo ritmo que llebamos los desarrollados. No se trata de una carrera en la que lo que ganen los países pobres será a costa de los desarrollados, sino que todos podemos beneficiarnos. Cuando China o India sean más ricos podrán compar más cosas a España o Estados Unidos y será mejor para todos".
"Por eso sería bueno el tratado de libre comercio entre Estados Unidos y Europa que empieza a negociarse. Aunque hay que tener en cuenta que el comercio también genera perdedores, al mismo tiempo que ganadores. Pero en terminos generales hay más ganadores. El comercio es como el progreso tecnológico, que a veces cuesta empleos, al automatizar las empresas. Pero a la larga será positivo para el nivel de vida de las personas y la economía".
"En cuanto a la intervención del Estado en la economía es importante que intervenga en áreas como la educación o la sanidad -comenta Yoram-. En Estados Unidos muchos dicen que el presidente Obama es socialista porque quiere Seguridad Social para todos. Esa es un área que la economía no garantiza. por eso es fundamental que el Gobierno intervenga.".
"El debate sobre la Seguridad Social también está en EE.UU. Muchos piensan quedentro de cuarenta años no habrá dinero para nadie, pero la realidad es que sólo podremos pagar el 75 por ciento de lo que se había prometido, no es que no podamos pagar a nadie. Simplemente habrá que pagar menos a la gente o aumentar los impuestos. No conozco la situación en España pero lo único que hay que hacer es calcular la brecha entre el dinero que hay y lo que se promete a los que se jubilan. A la larga no cero que sea imposible cerrar esa brecha. Se pueden subir los impuestos a los que más tiene o discretizar los pagos. Es decir, si te jubilas y tienes mucho dinero ¿por qué recurrir también a la Seguridad social?".
"Si yo tuviera un poco de dinero actualmente crearía un fondo de jubilación -asegura Bauman-, pondría el dienero en una cuenta y que me lo inviertan de manera diversificada. Y cuando más te acerques a la edad de jubilación tu filosofía de inversión será menos arriesgada. Es decir, de joven está bien arriesgar un poco el dinero pero de mayor eres más cauto. Los ahorrros que conseguiré de las amplías ventas que va a tener mi libro (bromea), los pondré en un fondo de jubilación".
"El tema de "la gestión automática" es interesante, porque una de las cosas que nos ha enseñado la economía en los últimos años es que las personas no siempre toman las mejores decisiones. Por ejemplo, si tienes una empresa y entran empleados nuevos, si les dices: "Si queréis que pasemos el 10 por cineto de vuestros ingresos a un fondo de inversión", la mayoría no lo haría. Pero si les das un papelito donde ponga: "Vamos a coger el diez por ciento de esta renta para invertirlo y si no quieres hacerlo firma aquí", tampoco dirán que no. Se suelen quedar con lo que les ofreces. Por eso ahora está lo que llamamos "arquitectura de las decisiones", que básicamente es intentar ayudar a las personas para que tomen las mejores decisiones a la hora de invertir su dinero. Es la idea subyacente a estos fondos de jubilación".
Aún así, confiesa que sabe lo que ha pasado aquí con las preferentes que los Bancos han ofrecido alegremente a sus clientes: "Antes de la crisis en EE.UU. pasaron cosas parecidas a las preferentes. Teníamos lo que llamábamos los "créditos Ninja", que eran para gente "sin ingresos, sin empleo y sin activos". Ibas al banco y te daban 300.000 dólares para comprarte una casa, sin ninguna garantía. Ahora espero que hayamos aprendido la lección y la gente se preocupe de saber lo que está firmando. Y las leyes nos protejan un poco más".
Aún así, Bauman asegura que está crisis habrá servido, al menos, para: "Que a partir de ahora no vivamos por encima de nuestras posibilidades. Además los economistas hemos descubierto fallos del sistema que podremos mejorar para que ciertos errores no vuelvan a repetirse".
Yoran asegura que tras el éxito de estos libros, traducidos a varios idiomas, el siguiente será sobre el cambio climático, y la economía aplicada a dicho cambio. Y después alguno sobre cálculo".
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